Por qué abril es un momento mágico para visitar Islandia
Cuando la mayoría de la gente piensa en visitar Islandia, imagina el sol de medianoche del verano o los cielos invernales repletos de auroras. Pero déjenme contarles un pequeño secreto: abril es una de las épocas más subestimadas para visitar esta tierra de fuego y hielo. Es un mes en el que Islandia empieza a despertar de su letargo invernal y a despertar tranquilamente a la primavera, con mucha menos gente y una belleza salvaje e indómita.

1. Lo mejor de ambos mundos: el invierno se encuentra con la primavera
Abril en Islandia es una hermosa mezcla de estaciones. La nieve aún cubre las montañas, ofreciendo ese paisaje nórdico de ensueño, mientras que las tierras bajas comienzan a descongelarse, revelando musgo verde, cascadas y una vida floreciente. Puedes hacer senderismo por glaciares por la mañana y caminar por campos de lava en flor por la tarde.
2. Contempla la aurora boreal antes de que se despida
Esta es tu última oportunidad real de la temporada para ver la aurora boreal. El cielo aún está bastante oscuro a principios de mes, especialmente fuera de las ciudades. Con menos turistas, probablemente disfrutarás de experiencias de observación de auroras más tranquilas y privadas.
Consejo: alójese en algún lugar rural, como cerca de Vík o la península de Snæfellsnes, para disfrutar de cielos más oscuros y mejores vistas.
3. Menos turistas, más serenidad
Abril cae justo antes del inicio de la temporada alta, así que disfrutarás de filas más cortas, aguas termales más tranquilas y mayor disponibilidad de tours y alojamiento. Lugares como la Laguna Azul o el Círculo Dorado no estarán tan concurridos, lo que te permitirá sumergirte en la magia (y no solo en el agua).
4. Cascadas épicas en plena acción
Gracias al deshielo, cascadas como Skógafoss, Seljalandsfoss y Gullfoss rebosan de energía. La fuerza y el volumen de estas cataratas en abril son extraordinarios: ruidosas, brumosas y absolutamente impresionantes.
5. Comienza la temporada de frailecillos
Entre mediados y finales de abril, los frailecillos comienzan a regresar a los acantilados para anidar. Con suerte, podrá avistar a estas adorables aves en las costas, especialmente en Dyrhólaey o Látrabjarg a finales de mes.
6. El momento perfecto para un viaje por carretera
La carretera de circunvalación se vuelve más accesible a medida que se derrite la nieve, y aunque algunas carreteras de las tierras altas siguen cerradas, hay muchísima aventura por delante en las principales rutas de Islandia. Simplemente prepárate para un clima impredecible: el sol puede convertirse en nieve en un instante, así que lleva varias capas de ropa y alquila un 4x4 si vas en coche.
Consejos rápidos para viajar a Islandia en abril:
- Lleva capas: ropa impermeable, capas base abrigadas y una buena chaqueta son esenciales.
- Consulte las condiciones de la carretera diariamente en road.is.
- Reserve con antelación excursiones populares como caminatas por glaciares, cuevas de hielo y avistamiento de ballenas.
- No te pierdas las piscinas geotermales locales: hay lugares increíbles más allá de la Laguna Azul, como la Laguna Secreta o los Baños Naturales de Mývatn.